A cuartos sin concesiones
El CB Canarias alcanza los cuartos de final de la Basketball Champions League después de vencer al PAOK de Salónica por un contundente 80-54 que resume con claridad quién fue el dominador de un partido, emocionante dentro y fuera del parqué, con una afición que casi abarrotaba La Hamburguesa, completamente entregada a la causa aurinegra.
Sin embargo, el partido se empezaría a decantar hacia el lado local a partir del segundo cuarto, donde los Doce de Vidorreta, con una defensa asfixiante, solo permitieron anotar seis puntos a los visitantes, como pocos días atrás al Real Madrid.
Tras el salto inicial, los contendientes iniciaron una primera ronda de reconocimiento, donde ambos equipos sacaron a relucir cierto nerviosismo pues la eliminatoria había quedado en el alero tras el regreso de Salónica con una ligera ventaja de tres puntos de los griegos.
Los helenos trataron de imprimir un ritmo lento al partido, metiendo muchos balones en la zona local donde su máximo garante, el norteamericano Clanton, imponía su envergadura anotando y reboteando con demasiada alegría.
Al final del primer cuarto se llegaba con un exiguo 15-10 que presagiaba un encuentro de toma y daca, pleno de nerviosismo, que se resolvería en los últimos instantes si los aurinegros no tomaban cartas en el asunto. Cosa que así hicieron tras la reanudación, imponiendo una vez más su defensa que permitió atacar con mayor rapidez en las transiciones y anotar con mayor facilidad.
Por otro lado, cuando se llevaban disputados dos minutos de este segundo cuarto, se lesiona Clanton, uno de sus principales bastiones, que abandona el campo de juego para no volver más. Con esta seria baja, los visitantes pierden uno de sus principales referentes de juego y no son capaces de responder a la presión defensiva de los locales que provocan numerosas pérdidas del balón al rival y permite a los aurinegros subir un par de marchas al partido.
Al descanso se llega con una diferencia clara en el marcador (37-16) y con el cuerpo técnico del equipo griego fuera de sí, encabezado por el propio presidente que baja del palco para increpar a los colegiados por un supuesto mal arbitraje.
La segunda parte se reanuda con un tiro libre por la falta técnica pitada al banquillo visitante. Una pequeña delegación de seguidores griegos tuvo que ser reubicada en el anillo superior del pabellón porque se empeñaban en ver el partido de pie en las localidades que se les había asignado, con la consiguiente molestia para los espectadores circundantes.
Los locales no bajan un ápice su intensidad y continúan con el dominio de un partido cuyo marcador se mantuvo por encima de los veinte puntos de diferencia durante el resto del choque, aunque los visitantes estuvieron más certeros en ataque.
Entre los Doce de Vidorreta, destacó la actuación de Marius Grigonis, MVP del partido con 20 puntos y 5 asistencias, bien secundado por Rodrigo San Miguel, que vuelve a ver el aro después de un par de jornadas de sequía, con 13 puntos.
Cabe destacar también la actuación de “Petit” Niang durante los 11 minutos que estuvo en cancha, poniendo 4 tapones y anotando 4 puntos. La solidez del joven jugador senegalés bajo el aro fue la que catapultó al equipo aurinegro en el segundo cuarto para despegarse en el marcador.
Buena actuación también en defensa de Tim Abromaitis (8 rebotes y 8 puntos), así como del griego Bogris, autor de 10 puntos y 6 rebotes.
Tras esta eufórica victoria ante uno de los grandes equipos de Europa, el CB Canarias se verá la cara en cuartos de final con el equipo francés del Asvel Lyon Villeurbanne. El primer partido se jugará en la ciudad francesa y la vuelta, en La Laguna, puede marcar un nuevo hito en la historia del club con la posible clasificación del equipo aurinegro para la Final Four, cuya sede está todavía por designar. Seguimos rompiendo moldes en una temporada magistral.
¡Vamos Canarias!
